-HORNEANDO AMOR-

 

Estoy a solo unos días de cumplir 41 años y por mucho este ha sido uno de los años más especiales, únicos, de más aprendizaje, de noticias que me robaron el corazón.

De reinvenciones una y otra y otra vez. Y es que como diría Margaret Atwood “Eres libre de reinventarte como te plazca” Y vaya que este año está siendo la prueba de ello.

Les juro que siento que soy otra persona desde enero. Ni por asomo soy la persona que pidió 12 deseos y si en ese momento me hubieran dicho todo lo que iba a pasar en 11 meses y todo lo que ha pasado desde mi cumpleaños no me lo hubiera creído.

He crecido mucho, he cambiado demasiado, he trabajado en mí en formas que no conocía, tuve que salir 100% de mi zona de confort y dar un giro de 180 grados a mi vida, en más sentidos de los que me hubiera gustado.

Y fuera de la incomodidad que esto provocó, de lo doloroso que puede llegar a ser, de lo difícil y rudo que es, solo puedo decir que ha sido algo que está valiendo el esfuerzo y vaya que ha valido la pena.

Estoy creando la conexión más profunda, intensa, extensa y divina que podría estar haciendo, a tan solo unos días de mi cumpleaños, acabo de cumplir 5 meses de embarazo, de una niña hermosa, de la que estoy perdidamente enamorada.

Y ayer estaba justo platicando con una mujer que a sus 24 años me juraba que no quería tener hijos, y solo me reí por dentro, porque yo a mis 40 no estaba segura si los tendría, y por supuesto que hace 16 años ni estaba en mi radar. Pero la bebé llegó en un momento que jamás me hubiera imaginado, en unas circunstancias que al día de hoy sigo sin entender, pero que cada día estoy más segura fueron por algo.

Y solo se que ya no importa el ¿cómo y sí el por qué y para qué?, y el porqué es para traernos todo el amor del mundo a todos los que la vamos a rodear, empezando por su papá y por mí.

Y el para qué para transformarnos en unas mejores personas. El mejor regalo  que nos dio esta bebé al elegirnos como papás, y espero que jamás se arrepienta de ello. Ha sido desbordarnos de amor puro, de ilusión, de ternura, de complicidad.

Hace años que no sentía estas ganas locas por todo, por escoger su nombre, que lloré cuando su papá y yo por fin lo decidimos y lo dije en voz alta y cada día me gusta más y más.

Ni hablar del día que me enteré que era niña y lloré de la emoción de saber que iba a tener una cómplice de por vida.

No le quiero prometer nunca cosas que no le voy a poder cumplir, pero si le puedo prometer cosas que día a día me voy a esforzar porque sucedan como brindarle una crianza amorosa, respetuosa y llena de buenas intenciones.

Es irreal las ganas que tengo de disfrutar cada instante de ella, de ser su mejor cómplice, de llenarla de besos y abrazos, de reír juntas, de no perderme un detalle de su existencia.

Le quiero devolver cada día de su vida lo que hoy ella al estarla horneando me está dando: una ternura irreal por imaginarla y ponerle la ropa que con tanto amor le estamos comprando, le quiero dar la misma emoción por ser testigo de cada cambio y cada momento que hoy vivimos juntas.

Cambios que si les soy bien honesta al mismo tiempo que son maravillosos también están siendo bien rudos, y no hablo solo de los físicos, que es impresionante ir viendo como te cambia el cuerpo día a día.

Hablo también de las hormonas, de la incertidumbre, del rezar diario y platicar diario para que venga sana, de tus estados de ánimo.  De la fortaleza que día a día se va afianzando, de la valentía que tienes que tener desde el día uno que decides seguir con la decisión de dar vida.

No ha nacido y es impactante como ha tocado ya a tantas personas. Siempre le voy a agradecer el que les devolviera la ilusión loca a sus abuelos, y les inyectara esa emoción total.

Y ni hablar de sus papás que nos trae locos de amor, y de ilusión por conocerla, por amarla por cuidarla y por procurar su bienestar siempre.

Es impactante la responsabilidad que te da el querer que, con tu crianza amorosa y respetuosa, esa niña se vuelva una niña que deje una huella en el mundo. Que sea una niña buena, educada, respetuosa y amorosa.

Alguien que desde ya está destinada a cambiarlo, y saben cómo estoy tan segura, porque estallo de orgullo de decir que es tan crack, que al menos el de sus más cercamos ya lo está consiguiendo.

Porque mi mundo y el de su papá es mucho mejor, es más lindo, es más consciente desde que sabemos de su existencia. Y ni hablar del de las personas que nos rodean, que nos quieren y queremos.

No la conocemos aún y ya nos robó el corazón a todos. (Espero que ese hábito del robo se le quede y nos siga robando sonrisas, lágrimas de alegría, abrazos y besos)

Me impacta lo especial que es, no hay un día desde hace 4 meses que no repita que es magia pura, y estoy segura que va a poner el mundo de cabeza con ese carácter tan único que tendrá.

Pero lo mejor es que la veo claramente poniéndolo de cabeza desde el amor, desde las sonrisas, desde la ternura, y la transformación.

Se que para todos,  nuestros hijos son los más especiales, pero esta bebé si se está pasando. No le dejaré de agradecer jamás la fortaleza que me ha inyectado, el cada día convencerme más y más que todo va a estar bien.

Ir derrotando la incertidumbre, con sus certezas. Porque se que todo va  estar bien con nosotras, porque hoy le puedo jurar con sangre que me voy a matar porque suceda, por siempre procurar su bienestar, y llenarla de amor y respeto.

Le doy gracias por recordarme diario que eso que siempre he tratado de hacer consciente que es: en un día a la vez, con ella se va a convertir en mi realidad más fuerte. Porque nunca voy a volver a tener su primera sonrisa, o llanto, o tomada de la mano, o un mamá o un primer paso.

Por lo que quiero ir imprimiendo todo en mi memoria. Ningún día va a ser igual, y ninguno volverá.

Esta bebé me está recordando vivir en el presente, en no futurear, en prestar atención a todo. En tener metas a corto plazo. A percibir cada cambio del cuerpo, a identificar mis emociones, y todo lo que pasa en nuestro día a día.

Le quiero prometer que siempre le voy a dar lo  mejor de mí, y que a pesar de mis múltiples fallos, me esforzaré diario por ser una versión más centrada, amorosa, equilibrada, que siempre la haga sentir amada.

Que le haga recordar que somos su norte y que con nosotros todo va a estar bien, que, a pesar de las dificultades del mundo, siempre tendrá un lugar seguro en nosotros.

Siempre le voy a dar todo lo que necesite en la vida, no todo lo que quiera, pero sí lo que necesite para que pueda seguir siendo magia, para que deje huella, para que desarrolle su potencial, y quien es desde hoy.

Pediré diario para que mi niña siga iluminando la vida de tantos como lo ha hecho hasta ahora. Y haciendo mejor tantas vidas como lo hace desde ahora.

Solo le puedo agradecer a ese pedazo mío por ser la bebé más especial. Por llenarme de magia, y por hacerme tan feliz al ser su mamá. Y por hacerme perder la razón para llegar al corazón.

Nos espera tanta magia juntas, tanto amor y cosas buenas. Que desde hoy ya estamos percibiendo.

El amor nos va personalizando a todos, y vaya que esta bebé lo personalizó de una forma inimaginable, pero también en la mejor. Transformó todo el amor de su papá y mío en lo más especial y mágico que es su existencia.

Somos la suma de todas las decisiones que tomamos en la vida, por eso es tan importante el cuestionarnos diario que estamos haciendo hoy, para convertirnos y llegar a ser nuestra mejor versión del mañana.

Recuerden no hay nada mejor en este instante que este instante, disfrutemos que al final somos instantes irrepetibles.

 Gocemos cada instante, valoremos, agradezcamos y si tenemos suerte dejemos la suficiente huella, como para que cada que alguien nos recuerde lo haga con una sonrisa.

Gracias por seguirme en esta aventura y leerme. Si les gustó este post compártanlo en sus redes sociales para que más personas se enteren.

MJBDU